BUENOS AIRES.- La jueza federa María Romilda Servini de Cubría se convirtió en un escollo para las intenciones del macrismo de generar vacantes judiciales claves. La magistrada, que en diciembre cumple 81 años, cuestionó ayer que el Consejo Asesor de la Magistratura (CAM) le haya dado un plazo de 24 horas a los jueces mayores de 75 años para contestar si tienen causas en curso para permanecer en sus cargos. La determinación del CAM ocurre tras fallo de la Corte Suprema de Justicia que fijó esa edad como límite para permanecer en la función judicial.
“Me mandan una notificación que tengo 24 horas para responder como si me fuera a esconder, o salir del país, como si fuera una delincuente”, se quejó la magistrada. Junto a ella, otros 26 jueces recibieron la misma notificación.
“Me he tenido que tomar una licencia de 24 horas por cuestiones particulares para poder responder”, explicó Servini, quien criticó “lo mal hecho que está todo esto” y anticipó que va a contestar el oficio incluyendo su opinión al respecto.
En ese marco, Servini precisó que está jubilada desde el año 1994. “Cuando (Domingo) Cavallo era ministro de Economía nos quiso sacar la jubilación privilegiada de jueces. Yo previo a eso me jubilé pero nunca presenté la renuncia”, explicó.
La magistrada dijo que nunca le pidieron la renuncia y que tampoco se la pueden pedir porque “eso sería un apriete, salvo que haya cometido un error muy grande”. Servini de Cubría ocupa el Juzgado Criminal y Correccional Federal número 1 desde hace 25 años.
En ese marco, reiteró que el fallo de la Corte Suprema está “digitado” en su contra y volvió a apuntar por eso -tal como lo hizo ayer- contra el presidente del máximo tribunal, Ricardo Lorenzetti.
“Si tenía alguna duda, ahora la tengo confirmada, no tiene explicación todo este movimiento, este apuro en el momento preciso”, dijo Servini quien tiene bajo su jurisdicción dos causas que apuntan contra el titular de la Corte, iniciadas por la diputada Elisa Carrió, entre otros expedientes que, a juicio de la líder de la Coalición Cívica, comprometen los intereses del titular de la Corte.
“La Dra. Servini es la única magistrada en todo el país que tiene abiertas investigaciones en las que está involucrado el Presidente de la Corte. La suscripta y miembros del partido al que pertenezco hace años que investigamos la corrupción en el Poder Judicial, hemos realizado presentaciones judiciales y he conocido de otras como las que realizara el Dr. Monner Sans, todas fueron cerradas menos las que tramitan en el Juzgado Criminal y Correccional Federal N° 1 a cargo de Servini”, señaló Carrió en la carta que le remitió al presidente Mauricio Macri y que difundió públicamente a través de las redes sociales. En este marco, expresó su preocupación porque “la jueza (por Servini) ya ha empezado a recibir planteos judiciales de nulidades al día siguiente del fallo ‘Schiffrin’, en causas con las que la suscripta y todos los argentinos deberíamos tener un compromiso total por búsqueda de la verdad y la justicia”.
Por ese motivo, advirtió, siempre en relación a Servini de Cubría, que “una de la juezas que tiene a cargo causas de gran impacto institucional y que además tiene a cargo la competencia electoral en la Ciudad de Buenos Aires en un año en el que hay elecciones legislativas nacionales, está sufriendo ‘chicanas judiciales’ que intentan socavar la legitimidad de su jurisdicción, atacando todo lo por ella actuado en estos años”. (Télam-DyN)